jueves, 6 de diciembre de 2012
Justicia divina
Después de pasar sólo pesares
ahora sonrío de par en par
porque por fin pude lograr
alejarme de todos mis males
Cuando me creía por vencido
por un corazón insano
de repente, alguien me dió su mano
para enseñarme el camino erguido
Cuando me veía sin futuro
alguien se fijó que no era justo
así que de un buen susto
me lanzó al sendero seguro
No había notado el poder de orar
pero un gran amigo me dejó esa salida
al ver que mi alma estaba bien perdida:
ahora el buen resultado debo de contar
Era como mendigo sin refugio
por suerte firme me pude mantener:
alguien en la distancia me iba a favorecer
con un magnífico artilugio
Gracias a la justicia divina
te tengo a tí, mi amor
y todo se lo debo al poderoso Creador
por liberarme de tan grande espina
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